Carolina Marzán busca endurecer las sanciones a quienes cometan este mal hábito.
Según datos de un estudio, hecho por fundación Libera, se estima que 6 billones de cigarrillos se consumen anualmente en el mundo, y que el 75%, es decir 4,5 billones, terminan siendo botados en lugares públicos. Al mismo tiempo, se estima que una colilla se demora entre 1 a 10 años en degradarse. A esto se suma, según cifras de la Universidad Politécnica de Cataluña, que una colilla puede contaminar hasta 50 litros de agua, y que es la principal causa de incendios forestales en el mundo. En este contexto, y considerando la situación nacional, Carolina Marzán presentó un proyecto de ley para sancionar a quienes arrojen colillas al suelo.
El proyecto consta de tres puntos importantes: multar a quienes se deshagan inapropiadamente de filtros o cenizas, colocar contenedores en las comunas para depositar las colillas, y finalmente, asegurarse que los filtros comercializados en el mercado sean biodegradables, o estén aptos para reciclarse, hacer compost, etc.
Al respecto, la actriz fue enfática y recalcó que con esto se pretende que los fumadores “entiendan que el planeta no es cenicero”. Al mismo tiempo, fue clara en afirmar que si los lugares “no cuentan con patios o espacios al aire libre, deberán instalar en su entrada ceniceros, contenedores o receptáculos destinados al depósito de filtros, colillas y cenizas de cigarrillos, procurando facilitar el reciclaje, reutilización o compostaje de estos residuos”.
