Académica de la Universidad de Talca aseguró que la crisis sanitaria continúa causando afecciones psicológicas en varios grupos etarios, principalmente niños, jóvenes y adultos mayores.
Tras cumplirse un año del primer caso de contagio por Covid-19 en país, los estudios demuestran un aumento de afecciones de salud mental. Según los especialistas, las condiciones generadas por la pandemia han propiciado un incremento en los trastornos psicológicos que se presentan en la población en general, y específicamente en los grupos etarios más vulnerables.
La coordinadora clínica del Centro de Psicología Aplicada (CEPA) de la Universidad de Talca, Carla Mendoza, aseguró que, de acuerdo con estudios recientes, “cerca del 34,6% de la población presenta algún síntoma de salud mental”.
Como una forma de evitar la propagación del Coronavirus, durante el último periodo se suspendieron actividades escolares normales, se limitó el contacto físico y se aisló a las personas de mayor riesgo. Según aseguró la académica, “la pandemia ha cambiado nuestras rutinas, ha traído incertidumbre, aislamiento social, presiones económicas y temor a enfermar”, factores que contribuyen en el desarrollo de trastornos psicológicos en grupos específicos de la población, que presentan mayores índices negativos.
“La salud mental de los niños, niñas, adolescentes, mujeres y adultos mayores se ha visto afectada visualizándose síntomas de ansiedad y de depresión en diferentes segmentos del curso vital”, detalló la especialista de la casa de estudios utalina.
Las alarmantes cifras reflejan los negativos efectos de la crisis de salud para el bienestar mental de las personas, y demuestran la necesidad de contar con mayor apoyo profesional. “A un año de la pandemia la invitación es a preocuparnos de nuestra salud mental y buscar especialistas en caso de necesitarlo”, recomienda la psicóloga.